Hola a tod@s, en mi primer post de "vuelta al cole" me habría gustado hablaros de cómo empecé y terminé mis vacaciones. De cómo me preparé invitando a mi madre a una pedicura increíble en Mimathé, donde por cierto, si os identificáis como mis seguidores os harán un 10% de descuento, de lo genial que es Mojácar, de lo maravilloso que estaba el mar (como una balsa), de la locura del "Jo bar", de lo mucho que me gusta encontrarme con mis primos, de los abalorios que me compré, os habría puesto mil fotos chulas, vamos, lo normal de cuando uno vuelve de sus vacaciones, sin embargo, debido a los últimos acontecimientos acaecidos en mi día a día tengo que dedicar este primer post a la continuación de mi "Odisea Tecnológica", que ya dura unos cuantos meses.
Todos sabéis que necesito cambiar de móvil, bien pues unas semanas antes de irme de vacaciones por fin conseguí que me dieran la Torch 9800, bueno, en realidad me la tenían que haber dado antes de irme de vacaciones pero no llegó, me dijeron que me la enviarían a Mojácar pero tampoco llegó.
Para que os hagáis una idea, mi móvil estaba muy, muy mal, la batería ya no duraba ni 30 minutos estando inactiva, si hablaba con alguien a los 2 minutos se cortaba, la pantalla se ponía en blanco, al terminal le empezaba a subir la temperatura y tenía que volver a enchufarlo a la red, que era de la única manera en que funcionaba aunque tampoco siempre, además dentro de la casa no hay casi cobertura así que no podía hablar y tener el terminal enchufado a la vez vamos, que me he pasado unas vacaciones semi-incomunicada, no he podido hacer ninguna fotito ni llevarlo a ningún sitio.
Lo llevaba hasta con celo porque había cogido holgura la tapa de la batería :-( |
Por fin, el viernes pasado me enviaron la Torch a la oficina. No os podéis imaginar qué alegría me llevé. Pensé, voy a configurar ahora mismo el teléfono y adiós a mi Curve, pero en la oficina no me podía descargar el software para hacer la copia de seguridad y sincronizar el móvil antiguo con el nuevo así que me dije, <mejor, así lo hago en casa tranquilita>.
Primera metedura de pata:
- Actualicé el software con el móvil enganchado y se me borró toda la información que tenía en la tarjeta SIM. Que no cunda el pánico, no pasa nada, tengo toda mi agenda guardada en la memoria del teléfono así que no pasa nada.
Segunda metedura de pata:
- Al sincronizar los dos terminales, en el nuevo me preguntaron si quería utilizarlo con el nuevo PIN, y en vez de darle a "SI", se me fue el dedo y le di a "NO", y allí ya se acabó todo, se me borró whatsapp, desaparecieron facebook y twitter, no podía configurar mis correos electrónicos y me entró el pánico.
Dejé todo, respiré, me puse un aperitivo y al cabo de un rato me armé de valor y puse la tarjeta en el móvil antiguo. Seguía teniendo acceso a mi información pero sin las aplicaciones, sólo lo básico y decidí no toquetearlo más.
Hoy iré a visitar a "Mi experto" a ver si puede arreglar el entuerto y de paso hacerme un exorcismo y quitarme el mal fario tecnológico que tengo.
Aquí iba a terminar mi post cuando he recibido un SMS, de la que en breve debía ser mi ex-compañía telefónica, diciendo que han rechazado mi portabilidad y dándome las gracias por continuar con ellos. Les he llamado y me dicen que no son ellos los que la han rechazado que son los de la que debería ser mi futura compañía telefónica quienes lo han hecho.
¡¡¡Casi me da algo!!!
Al final parece ser que había un problema que ya se ha resuelto y por fin tengo mi nuevo terminal configurado aunque la portabilidad se hará dentro de dos días y hasta entonces no cantaré victoria.
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