31/10/12

Hablemos de cine

Hace bastante que no os comento nada sobre ninguna película y creo que teniendo un gran ¡¡puente a la vistaaaa!! con temperaturas invernales y lluvia, ir al cine es una muy buena excusa para sacarnos de casa pero seguir calentitos y secos, así que os cuento mi impresión sobre las que he visto últimamente por si os puede ayudar a decidiros.

Comienzo por el gran maestro que es Woody Allen y por su última película, "A Roma con amor".



Después de la obra maestra que considero que es "Midnight in Paris" yo no esperaba otra y desde luego "A Roma con amor" no lo es.
He de decir que me gustó, es 100% Woody Allen aunque no es genial como "Midnight in Paris". Es una película coral con grandes momentos geniales y surrealistas tremendamente Allenianos, en la que habla de la vanidad, de cómo se manifiesta, nos afecta y la sobrellevamos cada uno de nosotros, que recomiendo ver aunque si no os queréis gastar el dinero en el cine no pasa nada, os dejo que la veáis por la tele.


Continúo con lo que considero un PELICULÓN, "Lo Imposible" de Juan Antonio Bayona.


A mucha gente este tipo de películas (las de catástrofes) no nos gustan nada y pasamos de ir al cine e incluso ni las vemos cuando las echan por la televisión. En este caso vi el tráiler y pensé que quería ir a verla. Ewan McGregor y Naomi Watts fueron un gran incentivo a la hora de tomar esta decisión. El hecho de que esté basada en la historia real de una familia española, que fuera una película española y que tratara sobre el Tsunami que tanto me conmocionó también. Vamos que tenía que ir a verla. Así que lo hice, la vi y aluciné.

Bueno, me mareé.
Realmente puedes sentir lo que ocurre en una situación así y siempre supera a todo lo que nos podamos imaginar. Hay escenas muy duras como es lógico pero es que fue algo  tremendo.
Naomi está enorme en ese papel, de Oscar y el hijo mayor igual. Esta película hay que verla y en pantalla GRANDE.

Sigo con otra película española, ésta con actores y todo, pero todo, todo, muy español, no como la anterior. Os hablo de "Blancanieves" de Pablo Berger.


Cuando supe que era en blanco y negro y muda pensé, ¿qué pasa? ¿que como "The Artist"
ha sido genial ahora el que quiera hacer algo pelín intelectual tiene que hacerlo igual? Luego escuché una entrevista con su director donde relataba que todo estaba planeado desde 2007 pero que el dinero se hizo esperar y me tragué mis palabras.
La idea me parece maravillosa, la estética es inmejorable, perfecta, te deja anonadado, muy técnica y ya.
Maribel Verdú, que mira que me gusta, está sobreactuada y no sueltas ni una lagrimilla ni te
conmueves un ápice con todo lo que le pasa a la pobre chica. Hay momentos en los que el sopor se apiada del espectador y resulta difícil no sucumbir. En definitiva, es una película SIN ALMA. Si os gusta todo el temilla técnico debéis ir a verla claro pero si no... os la podéis ahorrar.
Por cierto es la peli que han escogido para que nos represente en los Oscar. Tremendamente
pretenciosa, una pena.

Para terminar os dejo con "Argo", la última de Ben Affleck.


Este chico es un derroche de talento. Parecía que desde sus pinitos con Kevin Smith y "El indomable Will Hunting" no levantaba cabeza y sólo le recordábamos en leotardos (Daredevil) o como el EX de JLO (Jennifer López). Pero aquí, como el Ave Fénix, resurge de sus cenizas y crea una película genial que te mantiene pegado a la butaca desde el principio hasta el fin. Suspense que me recuerda al de algunas películas de Hitchcock, ¡ahí es nada!.

Una película basada en hechos reales que transcurre en 1979 y que trata del rescate de 6 diplomáticos americanos escondidos en el domicilio del embajador canadiense gracias a la intervención de un agente de la CIA.
Affleck dirige magistralmente este film además de interpretarlo y escribir el guión. Lo dicho, este chico es un portento. No dejéis de verla.

¿Habéis visto alguna de estas pelis? Contadme qué os han parecido please :-)


Para PeliTwittearme: @tabolid

29/10/12

Análisis, qué calvario

Hoy, he tenido que madrugar un poco más, por si fuera poco tenía prohibido desayunar y he orinado dentro de un tubito. Sí, hoy hemos pasado el reconocimiento médico anual de la empresa.

No sé cómo será en vuestras empresas pero en la mía nos hacen de todo, hasta un electrocardiograma, aunque lo que a mí me lleva por la calle de la amargura son dos cosas:

- La primera, no olvidarme de orinar en el tubito y sobre todo no olvidarme el tubito en casa, de hecho, estaba tan obsesionada que se me olvidó el móvil.

- Y la segunda es ¡¡¡EL ANÁLISIS DE SANGRE!!!

Cuando era pequeñita, los análisis me los hacía siempre el Dr. Paniagua. Nos recibía su mujer, que era encantadora y él, otro amor de hombre, divertido, simpático educado y como no, siempre tenía un regalo preparado para después del calvario como recompensa por habernos portado tan bien. Recompensa que en mi caso se transformaba en un regalo para que se me pasara el soponcio y que nunca conseguía el efecto deseado, vamos que me daba igual el chupa-chups y que preferiría no volver a comer un sólo chupa-chups el resto de mi vida si con ello dejase de hacerme análisis.

Mi hermana flipaba con los análisis, le encantaba mirar cómo la jeringuilla se iba llenando de sangre, no necesitaba que nadie le diera la mano y el chupa-chups lo tenía muy merecido por valiente sin escrúpulos.
En cambio yo, ay yo, ay madre mía que mal lo pasaba. Lloraba, doblaba el brazo, no me estaba quieta, daba igual lo que me dijeran, intentaba retrasar el mal trago todo lo que podía con la esperanza de que me dijeran que por esa vez estaba bien, que no hacía falta que me hicieran el análisis.

Nunca lo conseguí, al final siempre acababan engañándome y me lo hacían.

Hasta aquí todo normal, no creo que mi experiencia diste mucho de la de la mayoría de los niños en cualquier parte del mundo, pero es que, cuando la mayoría de los niños no pueden soportar el pinchazo y ver la sangre a mi me daba igual eso, ver mi sangre no me ha provocado nunca sensación de mareo (la de otros...), el pinchazo casi ni lo notaba y la aguja no me impresionaba, lo que yo no podía soportar era sentir cómo la jeringuilla estaba aspirando mi sangre. Sí, justo lo que todos te decían que no se notaba yo lo notaba y esa sensación siempre me ha dado dentera y me provocaba mareos.

El caso es que el tiempo pasó y pasó también el momento de hacerme análisis cada dos por tres hasta que con unos 18 ó 20 años tuve que hacerme una analítica para un chequeo rutinario.

Ya no iba a ver al Dr. Paniagua pero iba a unos laboratorios que hay o había en la C/Goya. Todo era normal, mi madre me acompañó, nos hicieron esperar un pelín en la sala de espera, ojeé alguna revista y me llamaron.

No pude evitar entrar en estado de shock cuando no dejaron entrar a mi madre conmigo.
- ¿¿¡¡Pero si ella siempre ha entrado conmigo porqué ahora no!!?? Pero... -

Ejem, conseguí disimular mi cara de pánico, al fin y al cabo ya era una mujer ¿no? y entré en la sala. Muy profesional me levanté la manga del jersey puse el brazo en su sitio y... cuando me iban a atar la goma no lo pude evitar, doblé el brazo, empecé mi ronda de aspavientos y empecé mi discurso en plan, - si ya sé que, bueno, pues que, vamos, que no pasa nada, pero, uf, es que, no lo puedo evitar, uf, es que - hasta que la enfermera me miró y me preguntó amablemente
- ¿Quiere que le de la mano? -
No pude más que responder un - Sí, por favor -

Después de esa vez, me hicieron una analítica antes de operarme del VPH y casi me da un yuyu cuando veo que los análisis los hacían de tres en tres y con un montón de gente mirando, pero logré sobrevivir. Y hasta hoy.

Sí, ya sé que ya tengo unos añitos, que a mi edad estas situaciones debería haberlas superado y que esto debería darme igual de hecho, en la actualidad me controlo bastante, ya no hago tantos aspavientos e intento no doblar el brazo pero es que no puedo, lo sigo pasando fatal.

¿¡Cuando van a inventar un análisis que sólo con un pinchacito y una gotita de sangre sea capaz de saber todo!?



Para AnaliTwittearme: @tabolid

23/10/12

Cosas CUQUIS para situaciones nada cuquis

Poco a poco van llegando a mis manos artículos monísimos pero que se utilizan para tareas que no nos parecen tan monas, al menos para mí. Por lo que decidí recopilar algunos en un post y enseñároslos.
El primer artículo es un destornillador, se lo regalé a mi Terremotillo hace unos años. Lo compré en una tienda que por aquel entonces acababa de abrir su primera sucursal en Madrid y que ahora tod@s conocemos muy bien, me refiero a Tiger. Mi amiga acababa de mudarse y claro, con tanto mueble por armar le venía muy bien. ¿A que aunque sólo sea por estrenarlo apetece ponerse manos a la obra?
Os cuento en voz baja que no me pude resistir y me compré otro igual junto con las tijeras
El siguiente son estos guantes tan cuquis para trabajar en el jardín o con las plantas de la terraza o con las del alféizar, para aquellos a quienes se les dé bien claro. Nada más ver los guantes de la foto me imaginé en el enorme jardín de mi palacete victoriano en mitad de la campiña inglesa, cortando rosas de mi rosal para decorar diferentes rincones de las muchas estancias de mi mansión y mira que tengo muy mala mano con las plantas. Pero es que fue verlos y tele-transportarme. ¿A que no son para menos?
 
La marca H5pro también tiene algunos modelos con los guantes para los papis y sus peques a juego, así pueden trabajar juntos en el jardín, además son lavables. ¿A que es una idea genial?
 
Siguiendo con el jardín, os muestro una foto mía con el cortacésped (perdón tractor) más mono y rápido del mercado, por supuesto es marca Garland. A parte de poder graduar la altura del corte, tener marcha atrás, saco recogedor, etc., corre que se las pela. Pero lo que hoy me ocupa es más bien la estética ¿a que queréis uno igual?
 
Para terminar, ahora que llega el otoño sé de buena tinta que a la mayoría nos da una pereza tremenda salir de casa los días de lluvia. Por mi parte os confieso que, después de pasar casi 7 años de mi vida en ciudades donde llueve prácticamente todos los días del año,  la lluvia ya no me encierra en casa, pero es verdad que da muuuucha pereza. Claro que después entras en las webs de Hunter y Gioseppo ves esas botas tan cucas, no te puedes resistir y caes en la tentación. ¿A que ahora quieres que llueva?
Gioseppo es además una marca española
Hunter
 
Y para terminar este post, como no podía ser de otra manera ¿A que vosotr@s también tenéis cosas cuquis para situaciones no tan cuquis en vuestra casa?
 
Para CuquiTwittearme: @tabolid

15/10/12

Bodas que te devuelven al verano


Después de unas semanas trabajando y justo cuando los días empiezan a acortarse, las noches son más fresquitas y las piscinas han cerrado, tuve la suerte de irme de boda a la playa y no a cualquier playa no, ¡a Almería!.
Siempre me ha gustado que mis amigos se casen fuera de la ciudad en la que vivo y si es en otro país aún mejor, me parece la excusa ideal para viajar y conocer otros lugares.
La primera boda a la que asistí fuera de Madrid fue en Venezuela, en Isla Margarita.
Mis amigos Miguel y José residentes en Londres decidieron que era el lugar ideal para comprometerse de por vida con sus amigos como testigos. Nos avisaron con 1 año de antelación, así pudimos ahorrar para el viaje.
Con Miguel y José en el año 2001
 
Alquilamos entre todos una casa, Las Hermanas, desde donde cuando te levantabas o caías en el mar o caías en la piscina. Miguel y José se casaron al atardecer. Llenamos el cenador de velas y de fondo sonaba la maravillosa canción de Sade "By your side".
Al margen de lo bonita y romántica que fue. Nos pasamos una semana muy divertida que, como no podía ser de otra manera acabó con mi pelo lleno de trencitas a lo Bo Derek en "La Mujer 10".
(Aquí os iba a poner una foto pero no la he encontrado :-()
La boda de Almería, ha sido mucho más convencional pero no menos romántica. La finca familiar está llena de árboles frutales y la habían decorado enteramente con velas, las mesas tenían el nombre de los árboles frutales de la finca y en cada una de ellas había una acuarela pintada con el árbol que representaba. Tratándose del sur no faltó un cuadro flamenco que te ponía los pelos de punta tanto la cantante, como el guitarrista y la bailaora eran impresionantes ¡y eso que yo no soy nada flamenca!.
Gracias a Carlos y a Teresa he podido, además de ser testigo de cómo se casa el "incasable" de la "pandi basurilla" y de estar con amigos a los que quiero mucho y a los que no puedo ver demasiado, prolongar el verano disfrutando de unos días más de playa en mi Mojácar del alma. Aunque casi acabo perdiéndome la boda del tortazo que me pegué en la piscina del hotel, tuve suerte y todo acabó en unos moratones.

A la izquierda al día siguiente de la caída a la derecha 6 días después
 
Y a vosotr@s, ¿os gusta asistir a bodas fuera de vuestra ciudad?
 
Para BodaTwittearme: @tabolid

3/10/12

Déjà Vu

Quien no ha dicho alguna vez aquello de "esta situación la he vivido antes" ó "esto lo he soñado" lo que llamamos un Déjà vu. Este verano tuve, una vez más, esa misma sensación.

Antes de nada aclarar que no creo cuando la gente dice recordar un sueño que ha tenido, tal cual. Tengo la teoría de que cuando estamos en la fase REM resulta imposible recordar lo que hemos soñado, sólo lo podemos recordar cuando estamos en proceso de lo que yo llamo, semi-inconsciencia ó semi-consciencia, es decir, justo antes de quedarnos profundamente dormidos o justo cuando empezamos a salir de la fase REM. Y creo que en los momentos previos al sueño profundo "nuestra mente crea" el sueño y en los momentos cercanos a despertarnos "nuestra mente modifica" los finales.



Os cuento.
Antes de irme de vacaciones, unos dos meses antes, tuve un sueño un tanto extraño. Me encontraba de vacaciones, en un lugar que parecía Mojácar pero que en realidad no lo era. Estaba con más personas, un amigo de mi primo Alex al que habré visto 2 veces en mi vida, con otra mujer y un niño/a que correteaba. Era de día, más o menos al atardecer.
La siguiente parte de mi sueño transcurría de noche en un lugar donde no había estado nunca, parecía un oasis, me recordaba al Tuareg, un after que hubo en Mojácar hace muchos años, pero no lo era. En las dos partes del sueño no estábamos solos, había más gente a la que no podía reconocer aunque sus caras estaban claras en el sueño.

Este verano viví esos momentos que había soñado.


En efecto estaba con el amigo de mi primo, la mujer de mi sueño era la mujer de este chico y el niño/a resultó ser la hija de ambos. A ellas también las conocía pero sin embargo su imagen en mi sueño no estaba clara y no pude reconocerlas como tales en él. No estábamos en Mojácar aunque estábamos en Cabo de Gata, de ahí que el lugar me resultara tan familiar. El local donde fuimos por la noche, era el Jo Bar y sí, se trata de un auténtico oasis en pleno desierto no, no había estado antes.

Lo más extraño de todo esto no es el haber estado con los amigos de mi primo en las mismas situaciones que en mi sueño, lo más extraño es que había dos personas en mi sueño a las que no había visto en mi vida y que, sin embargo, estaban allí compartiendo esos momentos conmigo.

En algunos casos dicen que el Déjà vu está más bien relacionado con las sensaciones que te producen determinadas situaciones. Al haberlas sentido con anterioridad nuestro cerebro las procesa como si hubiéramos vivido esa misma situación aunque en realidad lo que hemos hecho ha sido sentir lo mismo.

Por muy ciertas que sean estas teorías, cuando llego al momento en el que personas que no he visto en mi vida aparecen en un sueño y meses después se convierten en personas reales, no me cuadran ¿cómo puede ocurrir eso?.

No sé si volveré a ver a estas personas alguna vez más, lo que sí sé es que cuando me suceden este tipo de cosas me da un poco de miedo ya que no lo comprendo.

A lo mejor es que estoy aún peor de lo que a simple vista puede parecer o ¡quizá es que soy "adivina"! aunque de ser así, más me valdría soñar con los números ganadores del próximo Bote del Euromillón antes de hacerlo con gente que no conozco ¿no creéis?.

¿Os ha pasado algo parecido alguna vez?

¿Os da miedito igual que a mí?

Para DéjàVutwittearme: @tabolid